“Nuestra salud, nuestro futuro” (Our Health, Our Future), Editado por Martha J Garrett y Clement Bezold

(1) “Nuestra salud, nuestro futuro” (Our health, our future), Colin R Blackman (pp. 919-920).

(2) “El futuro de los futuros de la salud” (The future of health futures), Clement Bezold (pp. 921-925).

Los futuros de la salud representan la aplicación de varias herramientas de futuros a las arenas de la salud y la atención a la salud. Este número especial de la revista Futures refleja el importante crecimiento de los futuros de la salud. La salud y los sistemas de atención a la salud podrían estar mucho mejor en el Siglo 21 temprano, o podrían estar peor. Los futuros de la salud permiten a los individuos, organizaciones y comunidades a comprender mejor las amenazas y oportunidades que enfrenta su salud, siendo ambas profundas. La Red Internacional de Futuros de la Salud es un indicador del crecimiento de este subcampos de los futuros. El futuro de los futuros de la salud dependerá de la habilidad de las técnicas de futuros y de quienes las emplean para proporcionar valor para las organizaciones y los individuos. Una mejor construcción de redes entre los futuristas de la salud, sistemas expertos, y la habilidad para medir y comunicar calidad serán esenciales.

(3) “El futuro de los futuros de la salud: Otra perspectiva” (The future of health futures: Another perspective), Martha J Garrett (pp. 927-933).

Un buen “Mercado” para los futuros de la salud y un fácil acceso a información relevante están entre las razones por las que los futuros de la salud están centrados actualmente en las naciones ricas. Sin embargo, el interés en los futuros de la salud está creciendo en los países menos desarrollados, en parte debido a la Organización Mundial para la Salud (OMS) y su oficina regional. Pueden esperarse muchos beneficios si el campo se vuelve más internacional, incluyendo un influjo de ideas frescas sobre los diseños de estudios de futuros de la salud y sobre enfoques innovadores para la atención a la salud. Un cambio hacia una orientación más global es también imperativo simplemente porque los futuros de la salud tratan con el bienestar de seres humanos y la mayoría de los seres humanos viven en los países menos desarrollados del mundo.

(4) “Más allá de la medicina: Retos y estrategias para la salud en el Siglo 21” (Beyond medicine: Health challenges and strategies in the 21st Century), Trevor Hancock, Martha Garrett (pp. 935-951).

El futuro de la salud involucra mucho más que el futuro de la atención médica, dado que los principales factores que afectan a la salud son ambientales, sociales y económicos. La salud ha mejorado en general durante el siglo pasado, pero la continuación de esta tendencia se ve amenazada por el crecimiento de la población, la urbanización, el cambio ambiental, la pobreza, la inequidad, la guerra, las enfermedades transmisibles y crónicas existentes y posiblemente otras nuevas. Las nuevas políticas y estrategias emergentes para tratar con estos retos incluyen la formulación de políticas públicas saludables, inversiones en salud, y el desarrollo de nuevas estructuras y procesos de gobernanza. Los estudios nacionales integrados centrados en el bienestar humano y la salud ambiental son un medio a través del cual el campo de los futuros podría contribuir al mejoramiento de la salud en el Siglo 21. Los talleres de construcción de visiones y otras actividades participativas de futuros son igualmente importantes, dado que permiten a las personas y las comunidades tomar parte en la definición y logro de sus futuros de la salud preferidos.

(5) “Escenarios de salud y elaboración de políticas: Lecciones de Holanda” (Health scenarios and policy making: Lessons from the Netherlands), RF Schreuder (pp. 953-958).

Hace una década el gobierno holandés estableció el Comité de Dirección sobre Escenarios de Futuros de la Salud (STG) para organizar y facilitar la investigación y el debate sobre futuros alternativos en la salud pública. Desde entonces, el STG ha realizado docenas de proyectos de escenarios sobre temas específicos de salud, y los informes resultantes de ellos han jugado un papel importante en los procesos de toma de decisiones dentro del sector de la salud. Los investigadores, elaboradores de políticas y administradores que han estado involucrados en las actividades del STG también han aprendido mucho sobre cuáles métodos, procesos y arreglos organizacionales son mejores para este tipo de empresa. Esas lecciones son compartidas aquí para beneficio de otras agencias de salud interesadas en realizar programas similares.

(6) “Pronosticando los futuros japoneses de la salud con la TBP: En enfoque del lado de la demanda” (Forecasting Japanese health futures with the BFT : A demand-side approach), Yoshihisa Watanabe, Takeshi Tsubo (pp. 959-966).

En respuesta a los problemas asociados con la planeación de la atención de la salud desde el lado del suministro, el Instituto de Desarrollo de Sistemas de Salud ha creado un enfoque del lado de la demanda que ha sido llamado TBP (Tecnología de Biopronósticos). El sistema involucra la integración de datos sobre la población, el ambiente natural y social, y los servicios de salud/médicos/sociales con proyecciones sobre factores que influirán sobre la futura demanda de la población de diferentes clases de servicios de salud. Los pronósticos TBP han probado ser muy precisos. El sistema ha sido empleado a lo largo de Japón e internacionalmente, y son posibles aplicaciones mucho más amplias más allá de la planeación estándar de hospitales y la salud.

(7) “Un servicio de salud adecuado para el Siglo 21: El proyecto galés ‘Salud y Atención Social 2010′” (A health service fit for the 21st century : The Welsh ‘Health and Social Care 2010’ project), Marcus Longley, Christopher Riley, Morton Warner (pp. 967-977).

“Salud y atención social 2010”, un proyecto del Foro de Planeación de la Salud Galés, ha sido diseñado para vincular la estrategia global del Servicio Nacional de Salud en Gales con la planeación de estrategias de atención a la salud locales. Durante la primera fase del proyecto se identificaron fuerzas que podrían tener impacto sobre los servicios de salud y sociales en el futuro, y se analizó cómo podrían adaptarse los servicios a los cambios esperados. El resultado ha sido una visión de una nueva clase de atención a la salud basada en agrupamientos de servicios. Se han identificado también indicadores comprobables del logro de la visión en forma de nueve suposiciones sobre desarrollos futuros específicos en los servicios de salud y sociales. Grupos en varios sitios piloto han analizado estas suposiciones en términos de su plausibilidad y deseabilidad, iluminando así posibles obstáculos para alcanzar el futuro deseado, así como maneras creativas de darle la vuelta a estos problemas.

(8) “Evaluación de tendencias de la salud en Indonesia: Estudios de los futuros a nivel provincial” (Health trend assessment in Indonesia: Futures studies at the provincial level), Agus Suwandono (pp. 979-983).

Los estudios de evaluación de tendencias en salud se han realizado en Indonesia a nivel nacional y provincial, para proporcionar insumos para los planes nacionales de desarrollo de largo plazo y para construir la capacidad para la planeación local de la salud en anticipación a la descentralización. Los estudios provinciales de evaluación de tendencias en la salud se han realizado en cinco provincias por equipos de autoridades de salud y planeación locales y la escuela de salud pública local. Todos estos equipos provinciales han empleado documentos de respaldo y procedimientos estándar desarrollados por un equipo nacional y han tenido el mismo entrenamiento metodológico. Como resultado de la experiencia han surgido ideas específicas sobre cómo se pueden fortalecer las actividades de evaluación de tendencias y otras similares. Entre las recomendaciones están el establecimiento de centros nacionales de investigación para el análisis de tendencias, esfuerzos para mejorar la disponibilidad y fiabilidad de datos relevantes, la capacitación de un grupo de profesionales de la salud familiarizados con métodos de futuros, y una continuación de la promoción por parte de la OMS y otras agencias de la planeación de largo plazo de la salud y de los futuros de la salud.

(9) “Una visión para Nicaragua: Servicios de salud en el nuevo siglo” (A vision for Nicaragua : Health services in the new Century), Angel Sánchez Viesca (pp. 985-991).

Nicaragua enfrenta una crisis en salud y atención a la salud, y se ha iniciado un programa de futuros de la salud para centrar las preocupaciones y movilizar a los actores clave. Se han realizado dos talleres nacionales de escenarios en los que los participantes construyeron varios escenarios describiendo futuros alternativos de la salud para el país, con particular énfasis en la organización de los servicios de salud. Uno de éstos, un escenario de cambio profundo, fue seleccionado por los participantes como la visión del futuro preferido. Involucra más énfasis en la promoción de la salud, una descentralización de los servicios de atención de la salud, una participación más amplia en asuntos de salud, mayor capacitación para los profesionales de la salud, y un papel más fuerte de las universidades y otros centros educativos y de investigación. Se han identificado las implicaciones del escenario seleccionado con relación a las políticas y acciones de salud, entre ellas la adopción e implantación de la Carta sobre Promoción de la Salud de Otawa, la organización de redes locales de servicios de salud, y el involucramiento más activo de los profesionales de la salud en el diseño de los sistemas de salud.

(10) “El futuro de la terapéutica en el norte” (The future of therapeutics in the north), Clement Bezold (pp. 993-1003).

Los sistemas de atención a la salud ocupan desde el 6% hasta el 15% del PIB de los países desarrollados. La terapéutica, particularmente la atención hospitalaria, ocupan el grueso de estos gastos, a pesar de estar centrados en el tratamiento del desastre luego de que éste ocurre. En el Siglo 21 los sistemas de atención a la salud se centrarán en ganancias de salud. La terapéutica se ampliará para abarcar la prevención y el tratamiento y estará enfocada a las necesidades biológicas, sicológicas y sociales únicas individuales. Los principales asesinos, muy particularmente las enfermedades del corazón y el cáncer, serán mucho más prevenibles y curables, debido a cambios en los paradigmas terapéuticos hacia enfoques más holísticos así como a importantes rompimientos biomédicos. Existe una variedad de posibilidades negativas, incluyendo una prominencia continuada del modelo medico, costos crecientes, mayores desigualdades en el acceso, y mayor pobreza y desintegración social. El movimiento hacia terapias más centradas en ganancias de salud se acelerará debido a una variedad de tendencias, particularmente el desarrollo por parte de comunidades en Estados Unidos y muchos otros países de visiones compartidas que guiarán la evolución de la atención a la salud es estas direcciones.

(11) “Futura salud de los pueblos indígenas: Una vision de ecología humana y el caso de los Shipibo-Cinibo amazónicos” (Future health of indigenous peoples: A human ecology view and the case of the Amazonian Shipibo-Conibo), Maj-Lis Follér (pp. 1005-1023).

La salud tiene su base en las relaciones entre sociedades humanas y culturas y el ambiente. La salud de los pueblos indígenas que viven en territorios tradicionales está amenazada hoy por la destrucción de este ambiente y la introducción de nuevas enfermedades contagiosas; aquellos que se mueven a áreas urbanas sufren una salud todavía peor debido a las enfermedades de “civilización” y la pérdida de las redes sociales que proporcionan apoyo personal y atención a la salud. Contra las expectativas, en los países en desarrollo, donde viven muchos de estos grupos, no ha ocurrido una transición epidemiológica. Dos causas aparentes subyacentes -pobreza persistente y desigualdad política- están entre los factores que afectarán a la futura salud de los grupos indígenas, junto con tendencias en población, urbanización y el ambiente. Los grupos indígenas pueden jugar un papel importante en la determinación del futuro y ya lo están hacienda a través de proyectos de control territorial cuyo objetivo es proteger al ambiente del que dependen su salud y bienestar.

(12) “Información para la investigación de los futuros de la salud: Guía a los recursos publicados y en línea” (Information for health futures research : Guide to published and on-line resources), Martha J Garrett (pp. 1025-1057).

La mayoría del material publicado relevante para la investigación de futuros de la salud no está claramente etiquetado como tal, por lo que los futuristas de la salud pueden verse frustrados en su búsqueda de información hasta que aprendan algunas técnicas de búsqueda. Sin embargo, sí existen muchos libros, reportes y artículos sobre patrones epidemiológicos tendencias tecnológicas y transiciones en sistemas de atención a la salud, sobre factores de comportamiento, ambientales y sociales que afectan a la salud, sobre los objetivos y estrategias de las empresas farmacéuticas, proveedores de atención a la salud y otros actores, y sobre muchos otros aspectos relacionados con los futuros de la salud. Quienes buscan información probablemente tendrán éxito si prestan atención adecuada a los tipos de información que buscan, emplean una terminología de búsqueda bien pensada, y hacen uso de una variedad de tecnologías de la información. Recursos locales esenciales de información son el catálogo computarizado, literatura de referencia y secundaria, e índices en CD-ROM de una biblioteca de investigación. Las mejores apuestas en línea incluyen a la Biblioteca Nacional de Medicina OPAC, WHOLIS, DDBS en el IDRC, y Unvover en CARL. Otros recursos de Internet relacionados con la salud pueden ser identificados a través de árboles de materias en la Universidad de Rice y BUBL, Netlink en Washington y la Universidad de Lee, y árboles de materias de la WWWla Boblioteca Virtual WWW.

(13) “Algunos apuntes prácticos para recién llegados a los futuros de la salud” (Some practical hints for newcomers to health futures), Duncan Nicholson, Philip Hadridge, Geoff Royston (pp. 1059-1065).

Los tres autores de este artículo son relativamente recién llegados al campo de los futuros de la salud. Uno trabaja dentro de un Instituto de Salud Pública académico, otro en la capa regional del Servicio Nacional de Salud (NHS) del Reino Unido, y el tercero dentro de las oficinas ejecutivas del NHS. El lazo común entre ellos es el deseo de contribuir al desarrollo de nuevas maneras de planear para la salud y un deseo de ver a los futuros de la salud comprometidos con los servicios de salud para lograr un cambio efectivo. Con objeto de proveer consejos prácticos a otros que están empezando a cobrar interés en los futuros de la salud, los tres dan un vistazo a sus propias experiencias personales y resumen las lecciones que han aprendido.

(14) “¿Cuál futuro para los futuros de la salud en América Latina y el Caribe?” (What future for health futures in Latin America and the Caribbean?), Cristina Puentes-Markides (pp. 1067-1075).

La Organización Panamericana para la Salud (OPS), una oficina regional de la Organización Mundial para la Salud, es una agencia de Naciones Unidas especializada en proporcionar cooperación técnica a los países de América Latina y el Caribe. Un enfoque de futuros tiene mucho que ofrecer en esta tarea, y la OPS está poniendo las herramientas de los futuros de la salud a disposición de sus estados miembros a través de una variedad de actividades. El propósito de promover el pensamiento de futuros y la aplicación de las herramientas de futuros es mejorar la planeación de políticas de salud y la acción en salud pública dentro del marco de la visión “Salud para Todos” y las actuales Orientaciones Estratégicas y Programáticas de la OPS.

(15) “La consulta sobre futuros de la salud de la OMS” (WHO’s health futures consultation), Stephen A Sapirie, Stanislaw Orzeszyna (pp. 1077-1085).

La consulta de la Organización Mundial para la Salud de 1993 sobre los futuros de la salud examinó el campo desde perspectivas del macro-ambiente, el estado de la salud, los recursos para la salud, la tecnología de salud emergente, sistemas alternativos de atención, y herramientas para la investigación de futuros de la salud. La consulta produjo numerosas sugerencias sobre cómo la OMS podría promover y apoyar los trabajos de futuros de la salud. Entre las ideas que actualmente se están implantando están nuevos esfuerzos un la vigilancia global de enfermedades infecciosas, la publicación de artículos sobre los futuros de la salud, el establecimiento de un tablero electrónico de boletines sobre futuros de la salud, y la preparación de un manual para los estudios de futuros de la salud.

(16) “La Red Internacional de Futuros de la Salud (IHFN)” (The International Health Futures Network (IHFN)), Kathryn E Johnson (pp. 1087-1088).

La Red Internacional de Futuros de la Salud (IFHN) proporciona una oportunidad para que quienes están orientados hacia los futuros de la salud, liderazgo y elaboración de políticas estratégicas discutan el futuro de la salud y la atención a la salud, compartan ideas nuevas y visiones y profundicen en su comprensión de los asuntos internacionales de atención a la salud. Los miembros de la IFHN están comprometidos con la ambiciosa misión de “mejorar el estado de la salud en todo el mundo mediante la aplicación y el avance de los futuros de la salud”.

(17) “Índice al Volumen 27” (Index to volume 27), (pp. 1089-1093).