Vol. 25, No. 5, Junio 1993


Publicado en: sábado 19, junio, 1993

(1) «Tiempo y sociedad» (Time and society), Hugues de Jouvenel (pp. 491-493).

Este número de Futures, del que es editor invitado Hugues de Jouvenel, está dedicado a los patrones cambiantes del tiempo de trabajo en los países industrializados. Es el resultado de una continua cooperación entre Futures y Futuribles. Los artículos que se presentan aquí en inglés son una selección editada de los publicados primero en francés en Futuribles en mayo/junio de 1992. Damos las gracias a Hugues de Jouvenel y su equipo por hacer este número posible, y también a Frances Brown, el traductor. Espero que esta relación continuará creciendo y conducirá a más cooperación en el futuro.

(2) «Un cambio importante en el tiempo de trabajo» (A major change in working time), Jean-Yves Boulin, Gilbert Cette, Dominique Taddéi (pp. 494-501).

Este artículo describe cómo se concibió este número especial, la racional detrás de él y las principales lecciones que pueden extraerse sobre el tema del tiempo de trabajo en los, países industrializados. Muestra que podríamos estar en un punto de quiebre de la historia; está ocurriendo un proceso de transición fundamental entre una época -la era industrial durante la cual un tiempo de trabajo lineal, uniforme, basado en un modo específico de producción y conjunto de relaciones profesionales, fue impuesto como el pivote central alrededor del cual se organizó toda la sociedad- y otra, caracterizada por una notable reducción en, pero sobretodo una diversificación significativa de la naturaleza del tiempo de trabajo, i.e., un cambio rápido en su contenido y forma. Estamos siendo testigos del cambio de una temporalidad única impuesta de manera sincrónica -a una temporalidad plural -elegiendo individualmente el tiempo de trabajo y horas variables.

(3) «Una comparación internacional de los tiempos de trabajo» (An international comparison of working times), Olivier Marchand (pp. 502-510).

Aunque las estadísticas nacionales sobre la vida de trabajo son difíciles de comparar, aquí se presenta una visión general de las tendencias observadas en los principales países industrializados. Señalando primero que la reducción en el tiempo de trabajo que ha ocurrido en las últimas décadas, siendo común a todos los países, ha ocurrido de diferentes maneras y con diferentes tasas, y ha alcanzado niveles bastante desiguales, el artículo enfatiza que la tendencia dominante hoy es hacia una creciente diversificación del tiempo de trabajo por sector, por empresa, y hasta por trabajadores individuales. Este fenómeno de la individualización de las horas de trabajo, sin duda atribuible a nuevas limitaciones en la producción, es claramente resultado de la más general diversificación de los tipos de trabajo, ella misma concurrente con la atomización de los estilos de vida.

(4) «La organización social del tiempo» (The social organization of time), Jean-Yves Boulin (pp. 511-520).

Si toda la vida social ha estado estructurada alrededor de un solo modelo de empleo fundado en horas de trabajo estándar, la reducción en el tiempo de trabajo, y en particular la diversificación en las horas de trabajo, probablemente provocará una transformación radical tanto desde el punto de vista económico como social. Esta diversificación continuará, se argumenta, debido tanto a los nuevos imperativos económicos como a los desarrollos socioculturales. Se pronostica que el viejo modelo estándar está siendo reemplazado por una administración mucho más flexible de las horas de trabajo y, por tanto, del tiempo libre. Lo que no está tan claro es si esta flexibilidad en las condiciones de trabajo, que traerá con ella una revolución a nivel individual, de empresa y social, será o no igualmente benigna para todos.

(5) «La evolución del tiempo de trabajo en Alemania» (The evolution of working time in Germany), Gerhard Bosch (pp. 521-529).

Si el «milagro alemán» ha sido logrado pagando el precio de largas horas de trabajo y bajos salarios, los primeros han estado reduciéndose regularmente desde 1950, mientras que los segundos se han incrementado gracias al notable desempeño económico del país. Este artículo muestra como, en la casi total ausencia de provisiones legales y a través de negociaciones difíciles, el movimiento de los sindicatos alemanes fue capaz de obtener durante la década de los 1980 acuerdos dirigidos a lograr una marcada reducción en las horas semanales de trabajo desde 1995. El artículo muestra los términos y condiciones bajo las cuales se alcanzaron estos acuerdos, y qué concesiones, notablemente en el área de la paga, se hicieron. Adicionalmente, se enfatiza el tamaño de las disparidades en términos de desempeño económico y social entre Alemania oriental y occidental y se explora el impacto de la unificación.

(6) «Desarrollos recientes en el tiempo de trabajo en el Reino Unido: Percepciones desde la industria de la ingeniería» (Recent working time developments in the UK: Insights from the engineering industry), Paul Blyton (pp. 530-536).

Un gran número de factores en el Reino Unido han resultado en una reducción escalonada del tiempo de trabajo a lo largo del siglo pasado. Sin embargo, el autor argumenta que es necesario ir más allá de trazar los cambios en la duración de la semana laboral. Desarrollos recientes en el Reino Unido, particularmente en la industria de la ingeniería, muestran que mientras que los sindicatos continúan enfocándose en negociar reducciones en la duración del período de trabajo, los empleadores le han estado prestando atención creciente al arreglo de las horas de trabajo y a su intensidad. Como resultado, en el futuro será necesario considerar el período de trabajo en términos de la interrelación de su duración, arreglo e intensidad.

(7) «Japón: La reducción en el tiempo de trabajo: Una revolución cultural inacabada» (Japan: The reduction in working time: An unfinished cultural revolution), Yasuyuki Hippo (pp. 537-550).

Líder en muchas esferas, Japón es también el país donde las horas de trabajo son más, a pesar de su reducción iniciada en 1960. El artículo muestra cómo las actitudes hacia el trabajo son notablemente diferentes entre las diferentes generaciones y que los jóvenes en particular no comparten la actitud respetuosa de sus padres hacia la vida de trabajo; con todo, permanece viva una extremadamente rigurosa ética de trabajo. El resultado es que el tiempo de trabajo -de acuerdo con todas las mediciones- no se ha reducido de manera tan efectiva. Además de examinar tendencias en la reducción de las horas de trabajo, el artículo proporciona una descripción del funcionamiento de la sociedad japonesa, identificando en el proceso aquellos rasgos que la distinguen de manera tan fundamental de las sociedades europeas.

(8) «Más trabajo para algunos, menos trabajo para otros: Horas de trabajo en Estados Unidos» (More work for some, less work for others: Working hours in the USA), Sam Rosenberg (pp. 551-560).

A diferencia de Europa, el asunto de la reducción en el tiempo de trabajo virtualmente ha desaparecido del debate político nacional en Estados Unidos. En años recientes los elaboradores de políticas de Estados Unidos no han contemplado que una semana laboral más corta sea una herramienta efectiva para reducir el desempleo. El movimiento laboral, que históricamente ha demandado reducciones, ha estado relativamente silencioso sobre el asunto en tiempos recientes. Este artículo está dividido en tres principales secciones. La primera proporciona datos sobre la duración, naturaleza y estructura del tiempo de trabajo en Estados Unidos. Dadas las mínimas regulaciones gubernamentales con respecto a los patrones de tiempo de trabajo, la segunda sección analiza cómo los arreglos del tiempo de trabajo han sido regulados a través de acuerdos de negociación colectiva en la década de los 1980. En la tercera sección se investigan los futuros patrones previsibles en el tiempo de trabajo.

(9) «Los efectos económicos de reducir y reorganizar el tiempo de trabajo» (The economic effects of reducing and reorganizing working time), Gilbert Cette, Dominique Taddéi (pp. 561-577).

Este artículo va más allá del debate, a menudo ideológico, a favor o en contra de una reducción en el tiempo laboral, y analiza los efectos de un menor tiempo laboral a nivel de empresa y de país. La lógica y la experiencia dictan que tales reducciones deben ser acompañadas por un proceso de reorganización del trabajo e incluir una compensación financiera para quienes trabajan menos horas. Sin embargo, aunque estos tres ingredientes son indisolubles, no todas las empresas pueden proceder al mismo paso y de las mismas maneras. Con todo, el artículo muestra que, mientras la implantación proceda de una manera descentralizada y selectiva y esté acompañada por una reorganización juiciosa de éstas horas, podría ser extremadamente benéfica para todas las partes -compañías, el estado e individuos, tanto trabajadores como productores.

(10) «Convergencia post-industrial en la asignación del tiempo» (Post-industrial convergence in time allocation), Jonathan Gershuny (pp. 578-586).

Las sociedades desarrolladas, se argumenta, se están volviendo en diferentes aspectos, y por razones muy claras, más similares unas con otras en sus patrones de la vida cotidiana. Este artículo muestra, empleando evidencia del presupuesto temporal, una sorprendente convergencia multinacional en el balance amplio entre ocio y trabajo. Pero primero introduce un modelo de desarrollo, uno específicamente conectado con la evolución del uso del tiempo, un modelo que toma al tiempo laboral (y su consumo) como su variable central, pero que le debe más a Thorstein Veblen que a Karl Marx.

(11) «Políticas francesas sobre el tiempo de trabajo: Una pérdida de significado» (French policies on working time: A loss of meaning), Jean-Yves Boulin (pp. 587-601).

Los argumentos a favor de una reducción en la longitud del tiempo laboral en Francia han vivido una reversión extraordinaria en los últimos 10 años. En la década de los 1980, los tiempos laborales más cortos eran favorecidos por los sindicatos, que los veían como un instrumento de política social orientada a compartir el empleo de una manera más justa y a mejorar las condiciones de vida. Una década más tarde la reducción en el tiempo laboral ya no está en la agenda política ni es materia para una negociación colectiva; ha sido reemplazada por la administración y reorganización del tiempo laboral, a través del ímpetu de los empleadores que desean mejorar la competitividad de las empresas y que ven a la administración y reorganización del tiempo laboral como un paso necesario para ello. El autor analiza el desarrollo de políticas sobre el tiempo laboral en Francia y describe esta transferencia desde una racional social hacia otra económica.

(12) «¿Por qué Futuribles?» (Why futuribles?), (pp. 603-605).

Escrito por:

FJBS Admin