(1) «Pensando sobre los futuros religiosos» (Thinking about religious futures), William Sims Bainbridge (pp. 943-946).

(2) «Cuantificando futuros alternativos de la religión y las religiones» (Quantifying alternate futures of religion and religions), Todd M. Johnson, David B. Barrett (pp. 947-960).

Escritores sobre el futuro de la religión son usualmente proclives a plantear retratos de la declinación o resurgimiento de la religión. Sin embargo, la situación religiosa del mundo está repleta de información detallada, extraída de enormes colecciones de datos sobre afiliación religiosa y preguntas sobre religión en censos gubernamentales. Las herramientas cuantitativas que utilizan esta información en el contexto de la demografía -nacimientos, muertes, conversiones, deserciones, inmigración y emigración- proporcionan una visión más matizada del futuro religioso de la humanidad. Se pueden producir futuros alternativos de la afiliación religiosa mediante la extrapolación de las suposiciones explícitas relativas a estas seis áreas. Las tendencias demográficas junto con estimaciones conservadoras sobre conversiones y deserciones, visualizan que más del 80% de la población mundial continuará afiliada a religiones durante los próximos 200 años.

(3) «El futuro del Islam después del 9/11» (The future of Islam after 9/11), Mansoor Moaddel (pp. 961-977).

Este artículo proyecta el futuro posible del islam en Irán, Egipto, Jordania y más allá, analizando los antecedentes históricos y extrapolando a partir de datos de encuestas levantadas antes y después del 11 de septiembre de 2001. La cultura islámica es producida de manera dinámica, en lugar de ser un mero reflejo inevitable de los arreglos sociales, por lo que es importante comprender cómo sus líderes intelectuales y activistas perciben y resuelven los asuntos que enfrenta su fe. Los conceptos clave son los objetivos, en relación con los cuales se producen las ideas, y la visibilidad social. Si estos objetivos son visibles y claros, entonces se puede estimar razonablemente la clase de discursos religiosos que es más probable que se desarrollen en el movimiento islámico en el futuro. El futuro del Islam es más visible en Irán, donde hay un movimiento hacia el reformismo y un rechazo al Islam político. En Jordania hay una visibilidad moderada para predecir que el movimiento islámico de ese país continuará su tradición de moderación y conservadurismo. En Egipto el futuro del Islam es menos visible. Aunque el extremismo está declinando, no resulta claro el grado en que una alianza izquierdista-conservadurista podría dominar el paisaje cultural del país.

(4) «El futuro de las nuevas religiones» (The future of new religions), Massimo Introvigne (pp. 979-990).

La categoría de «nuevas religiones» es controversial, pero las minorías marginales siguen siendo un punto de inicio interesante para evaluar el futuro de la religión. Contrario a lo que muchos esperaban en la década de los 1970, el interés en la religión en general no ha declinado en el mundo occidental, la religión organizada no ha desaparecido, y no hemos sido testigos de una explosión de «cultos». Aprendiendo de estas profecías sociales del pasado que fallaron, podremos especular acerca del futuro en términos más realistas. Los nuevos movimientos religiosos no desaparecerán, pero tampoco tendrán un éxito excepcional, predice este artículo, porque los modelos que los marginalizan como basados en lavados de cerebro o una forma de kitsch religioso, aunque criticados al interior de la comunidad académica, sirven como una necesidad psico-cultural básica para explicar elecciones impopulares de nuestros compañeros seres humanos, y probablemente no desaparecerán de los prejuicios populares y de los medios.

(5) «¿Un futuro verde para la religión?» (A green future for religion?), Bron Taylor (pp. 991-1008).

En décadas recientes, han hecho erupción y se han intensificado los debates acerca de las relaciones entre religiones, culturas y los sistemas vivos de la Tierra. Algunos académicos han argumentado que los rituales y la religión pueden jugar un papel saludable como ayuda a los humanos para regular a los sistemas naturales de maneras ecológicamente sustentables. Otros han culpado a una o más religiones, o a la religión en general, de promover visiones del mundo y culturas que precipitan los daños ambientales. La producción religiosa en años recientes sugiere no sólo que muchas religiones se están volviendo más ambientalmente amigables, sino también que podría estar gestándose una nueva clase de religión cívica planetaria de la Tierra. Ejemplos de tal producción religiosa novedosa relacionada con la naturaleza permiten especular si, y en su caso de qué maneras, el futuro de la religión podría ser verde.

(6) «Religión y ciencia» (Religion and science), William Sims Bainbridge (pp. 1009-1023).

Empleando datos de una encuesta internacional masiva basada en la Web y de una variedad de otras fuentes, este ensayo explora tres diferentes modelos del futuro: religión sin ciencia; religión con ciencia, y ciencia sin religión. Al hacerlo, presenta ocho diferentes escenarios para el futuro de la religión que los ciudadanos del mundo imaginan actualmente: revitalización de la fe convencional; proliferación de movimientos religiosos; la nueva edad; fanatismo; conflicto religioso; el milenarismo; el cienticismo; y la secularización. Asuntos sociales tales como la explosión o el colapso demográfico y el conflicto inter-denominacional hacen que la futura relación entre religión y ciencia se vuelva de importancia crucial para el mundo.

(7) «Fe más allá del tiempo: el futuro de la religión en América» (Faith beyond time: the future of religion in America), Laurence R. Iannaccone (pp. 1025-1030).

(8) «El futuro de las relaciones iglesia-estado en Estados Unidos» (The future of church-state relations in the United States), Ted G. Jelen (pp. 1030-1033).

(9) «El futuro del Islam liberal» (The future of liberal Islam), Bülent Aras (pp. 1034-1037).

(10) «El renacimiento pagano y sus prospectos» (The Pagan revival and its prospects), Christopher McIntosh (pp. 1037-1041).

En este artículo el autor hace un levantamiento de la historia del neo-paganismo desde el movimiento romántico hasta el renacimiento en el Siglo 20 de la brujería, los druidas, los ásatrú y otras formas de religión pagana. Luego discute los prospectos futuros del paganismo, examinando varios factores sociales y culturales que operan a su favor, y otros que lo hacen en su contra. Concluye que el paganismo será una de las religiones del futuro, aunque probablemente no la dominante.

(11) «Religión, Guerra y la revolución de información» (Religion, war and the information revolution), Sara Horsfall (pp. 1041-1044).

(12) «Religión, futuros y futurismo» (Religion, futures, and futurism), Bruce Tonn (pp. 1045-1048).