Vol. 39, Nos. 2-3, Marzo-Abril 2007


Publicado en: lunes 30, abril, 2007

(1) «Resoñando Australia» (Redreaming Australia), Findlay, Merrill. (pp. 131-136)

(2) «¿El fin de la autodeterminación aborigen?» (The end of Aboriginal self-determination?), Anderson, Ian. (pp. 137-154)

El contexto del artículo es la abolición de la Comisión Aborígen e Isleña del Estrecho de Torres por el gobierno de coalición de Howard en 2004. El gobierno de Howard tiene una bien establecida antipatía hacia una agenda basada en derechos en asuntos aborígenes y las manifestaciones institucionales de auto determinación aborigen, particularmente a nivel nacional. Las reformas radicales que fueron señaladas por la abolición de la Comisión habían conducido a algunos comentaristas a pronunciar el fin de la autodeterminación aborigen. Sin embargo, esta idea surgió de la dinámica enfrentada entre el movimiento aborígen y el Estado australiano durante las últimas cuatro décadas. En consecuencia, el autor se muestra más optimista sobre el potencial para un futuro de autodeterminación aborigen. En la última sección de este artículo mapea tres posibles paisajes futuros que se diferencian principalmente por la capacidad del movimiento aborígen para renovarse y articularse con las oportunidades proporcionadas tanto por la naturaleza cambiante del Estado australiano como por el desarrollo de redes indígenas globales.

(3) «El futuro único de Australia: Lugar de reconciliación, historia y cultura» (Australia’s unique future: Reconciling place, history and culture), Camilleri, Joseph A. (pp. 155-168)

Durante los años recientes Australia ha optado una vez más por una concepción del mundo que se centra en sus conexiones europeas y especialmente estadounidenses. El trato duro de quienes buscan asilo, la «protección de las fronteras», la amenaza de acciones de pre-vaciado contra terroristas en la región e intervenciones en Irak han sido propuestas por el gobierno -y en gran medida aceptadas por el electorado- como una inversión e seguridad. Durante la mayor parte de la década, la profunda ambivalencia de Australia hacia Asia ha vuelto a salir a la superficie con una venganza. Este ensayo examina las bases sicológicas y políticas de este «salto al pasado», y argumenta a favor de una dirección de políticas más promisoria para el futuro. Trae tanto al análisis de políticas como a las prescripciones un enfoque que atraviesa las fronteras disciplinarias y la línea divisoria imaginaria entre los doméstico y lo internacional.

(4) «Reenmarcando el Estado-nación: Repensando el sueño australiano de lo local a lo global» (Reframing the nation-state: Rethinking the Australian dream from the local to the global), Jamer, Paul. (pp. 169-184)

El movimiento a través de las fronteras de los estados nación siempre ha sido dispar; pero durante las pasadas décadas el movimiento sin cortapisas de bienes e imágenes ha sido defendida bajo la ideología de libertad y apertura. Al mismo tiempo, el movimiento de personas, incluidos los refugiados, se ha vuelto cada vez más administrado y restringido en nombre del «interés nacional». Este artículo argumenta que Australia ha sido parte de este desarrollo. El sueño australiano fue alguna vez que todos tuviesen una vivienda de un cuarto de acre, protegida de las maquinaciones del mundo. Al cruce del Siglo 20 al actual, una versión ingrata de este sueño se ha intensificado, esquilando su espíritu igualitario. El propio Estado-nación se ha hecho sobre esta imagen. El Estado australiano actúa ahora a nombre de la nación para mantener a los extranjeros indeseados fuera, facilitando a la vez la globalización abierta de la economía australiana. En este contexto, los viejos pronunciamientos éticos sobre libertad, igualdad, apertura y justicia han dejado de operar. Este artículo desarrolla un enfoque alternativo basado sobre una formación de capas de consideraciones éticas. Se sugiere que el nuevo sueño australiano requerirá una renegociación completa sobre como habrán de vivir los australianos dentro y a través de las fronteras de identidad, cultura y economía.

(5) «Organizaciones no gubernamentales y la dialéctica del Estado y la sociedad civil» (Non-government organisations and the dialectics of state and civil society), Kenny, Sue. (pp. 185-199)

Este artículo trata de crear visiones del desarrollo de las organizaciones no gubernamentales (ONGs) en Australia durante los próximos 200 años. Inicia con una discusión de una ONG hipotética, proporcionando viñetas de sus actividades en 2104 y 2204, y bosquejando los factores contextuales que podrían influir el desarrollo de las ONGs. Esta discusión es seguida por un bosquejo de la metodología en la que se basan las proyecciones indicadas en el caso de estudio hipotético. Se emplean tres enfoques metodológicos. El primer enfoque empieza con un análisis de las actuales trayectorias contextuales, y proyecta el papel de las ONGs dentro de estas trayectorias. El segundo enfoque postula que los cambios que ocurrirán estarán afectados por la naturaleza reflexiva del cambio social, involucrando una continua reflexión y acción. El tercer enfoque metodológico echa mano de la noción de reflexividad, pero enfatiza que el cambio social no es sólo un proceso reflexivo, sino también uno dialéctico. El enfoque dialéctico descansa en la premisa de que el cambio ocurre a través de un proceso de acumulación de contradicciones, retos y resoluciones. Empleando estos enfoques metodológicos el artículo procede a identificar tres factores que influirán al sector de las ONGs australiano en los siguientes 200 años. Estos factores son las cambiantes relaciones entre el Estado y la sociedad civil, incluyendo el surgimiento del Estado neo-autoritario en el Siglo 21; las maneras en que se tratará a las personas menos privilegiadas; y, finalmente, la idea de sociedad de riesgo. Aunque es más difícil identificar las trayectorias contextual y de las ONGs en los Siglos 22 y 23, el artículo postula una visión más utópica para las ONGs en Australia dentro de 200 años, en la que la categoría de personas que previamente habían sido marginadas desaparece, y los principales papeles de las ONGs son asegurar la diversidad cultural y el desarrollo del trabajo civil.

(6) «Repensando Oz: más que políticas, el estado mental subyacente» (Rethinking Oz: More than policy, the underlying mindset), Stevenson, Tony. (pp. 200-214)

Los australianos, ¿se ven a sí mismos más como irreverentes (larrikins) o como víctimas? En este ensayo, el autor examina las atrincheradas suposiciones que loa australianos traen con mayor frecuencia a su comprensión de su presente y su futuro mundo. Mientras que algunos australianos contemporáneos han elegido una voz única, la mayor parte del resto han cambiado su herencia británica por la ilusiones de se-puede-hacer del Mago de Oz. ¿Romperá Australia este pensamiento arraigado para crear un nuevo futuro? ¿Se dará cuenta Oz de que los problemas que reclaman atención no necesariamente pueden ser resueltos por el pensamiento industrial de corto plazo que los crió? El actual sistema de pensamiento autoritario se remonta hacia atrás a través de dos milenios de civilización occidental, casi indisputado. Le falta la visión de largo plazo. Esta perspectiva industrial todavía define en gran medida la comprensión que tienen los australianos sobre sus elecciones para el futuro, limitando su creatividad para enfrentar a los dilemas y oportunidades que se presentarán más adelante. Este marco de pensamiento es lineal, de exclusión y competitivo. Busca ya sea hacerse cargo de los ritmos de la naturaleza o ignorarlos. Un marco de pensamiento de creación de redes, más que de control de arriba hacia abajo, podría estar empezando a despejar la bruma. Esta nueva manera de pensar es orgánica, de inclusión y colaboración -y ciertamente con conciencia de horizontes de largo plazo. Podría reemplazar la mentalidad de piratería y conformista por la auto-responsabilidad y el respeto por la diversidad. Los intentos recientes para reinventar a Oz con visión de largo plazo no han podido situarse fuera del pensamiento de marcos competitivos de la política de Westminster, limitada por su confrontación institucionalizada y su pensamiento de estado. Oz bien podría hacer un «compromiso con las generaciones futuras» al examinar marcos de pensamiento alternativos.

(7) «Inventando un futuro sustentable: Australia y el reto de la eco-innovación» (Inventing a sustainable future: Australia and the challenge of eco-innovation), Falk, Jim y Chris Ryan. (pp. 215-229)

Los posibles futuros de Australia dependen de elecciones que se hacen hoy. Una clave de las direcciones y éxito de Australia será su capacidad de dar forma a un ambiente para la innovación que satisfaga sus más amplias metas económicas sociales y ambientales. Los autores argumentan, a partir tanto de éxitos pasados como de potenciales futuros, que existen oportunidades para que los australianos se asignen un papel económicamente atractivo y globalmente constructivo dándole forma a sus estrategias para facilitar la eco-innovación dirigida hacia la sustentabilidad ambiental. Contrastan el papel de las innovaciones pasadas para facilitar desarrollos críticos en la disminución de la destrucción de la capa estratosférica de ozono con las actuales oportunidades de Australia para contribuir a través de la innovación a resolver el problema del calentamiento global y cambio climático antropogénicos. En particular, se centran en el poderoso papel potencial de la tecnología de la información para facilitar la innovación tecnológica y social hacia la sustentabilidad a través de la eco-innovación, y discuten principios estratégicos básicos en el contexto del potencial de tecnologías que ya están desarrollándose. Tales tecnologías ofrecen excitantes e importantes elecciones para los australianos durante los próximos años.

(8) «Hacia un futuro energético sustentable en Australia» (Toward a sustainable energy future in Australia), Kinrade, Peter. (pp. 230-252)

Establecer una visión del futuro energético de Australia a través de un marco de referencia de «fuerte sustentabilidad» podría mostrar un futuro que está basado en el uso eficiente y equitativo de la energía, a partir de un rango diverso de sistemas energéticos renovables y distribuidos. El suministro y uso de esta energía podría producir bajas o nulas cantidades de gases de efecto invernadero y otras emisiones. Un futuro energético sustentable en Australia podría ver también un cambio en el foco para satisfacer las necesidades energéticas de los servicios (con un incremento en el consumo de energía). Resulta de importancia que los usuarios de energía podrían verse empoderados, siendo participantes conocedores y activos en los mercados energéticos. En realidad, actualmente Australia se encuentra muy lejos de esta visión: las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas con la energía están creciendo con rapidez; el aprovechamiento de energía renovables es lento, particularmente en formas de energía distribuidas tales como los fotovoltaicos solares; y la intensidad energética de la economía está declinando con una tasa menor a la de muchas otras economías de la OCDE. Más aún, los australianos consumen mucha más energía de lo que es requerido para satisfacer las necesidades de servicios de incluso los modos de vida modernos. Para que Australia se mueva hacia un futuro energético sustentable, deben superarse barreras significativas, incluyendo aspectos de la estructura económica de Australia, un proceso de reforma del mercado energético mal dirigida, y una falta de pensamiento visionario por parte de los tomadores de decisiones. La esperanza proviene de la comunidad australiana más amplia, que de manera intuitiva apoya una visión energética sustentable pero que actualmente no cuenta con el apoyo institucional, de mercado y regulatorio para hacerla realidad.

(9) «Imaginando los futuros de los servicios energéticos de Australia» (Imagining Australia’s energy services futures), Pears, Alan K. (pp. 253-271)

Las maneras en que los australianos emplean la energía han cambiado significativamente en los pasados 30 años -por ejemplo, el sector de servicios de baja intensidad energética ha crecido su participación en la economía- y cambiarán más conforme se sienta el impacto de factores como el cambio climático, una población en proceso de envejecimiento, los cambios culturales y las tecnologías. Muchos consideran que el uso de la energía está dirigido por el crecimiento económico y de la población. Aunque estos dos factores son importantes, la naturaleza del cambio en los requerimientos de servicios de energía y la eficiencia con la que se entregan los servicios de energía son todavía más importantes. Este artículo discute las tendencias pasadas y futuras de los requerimientos de servicios de energía de Australia, y evalúa sus implicaciones para el suministro energético. Cambios en los requerimientos locales de servicios de energía significan que la demanda de energía y exportaciones de recursos australianos podrían declinar significativamente en términos absolutos, y la viabilidad de las redes convencionales de energía, incluso en ciudades, sería cuestionable. El resultado real será sensitivo a las decisiones, tanto conscientes como inconscientes, tomadas por individuos, negocios y gobiernos.

(10) «Desperdiciando el futuro -cambio climático, fracaso de las políticas y crisis del agua en Australia» (Squandering the future-Climate change, policy failure and the water crisis in Australia), Mercer, David, Linda Christesen y Michael Buxton. (pp. 272-287)

Desde la llegada de los europeos (1778), el desarrollismo estatal ha dirigido el uso de recursos naturales en Australia. A pesar de la evidencia de una declinación sistemática en la calidad de los ecosistemas australianos, la elaboración de políticas todavía refleja el paradigma explotador sobre el que descansa el desarrollismo estatal. Este artículo echa mano de cambios recientes de políticas en el sector del agua en Australia como un estudio de caso, permitiendo a los autores considerar los tipos de consecuencias sociales, económicas y ecológicas que pueden resultar del desarrollismo estatal. Alimentada por el cambio climático, la disponibilidad de agua está amenazando en convertirse en un problema extremadamente serio en Australia. A pesar de ello, los cambios de políticas recientes dentro del sector del agua es poco probable que logren un uso sustentable del agua en el corto plazo, y podrían hacer poco para subvertir el desarrollismo estatal como el paradigma dominante dentro del uso de recursos naturales en Australia en el futuro previsible.

(11) «Futuros australianos: ecosistemas de agua dulce y uso de agua para el consumo humano» (Australian futures: Freshwater ecosystems and human water usage), Lake P S y Nick R Bond. (pp. 288-305)

Las herencias históricas del cambio de uso de suelos, junto con las demandas crecientes de recursos de agua de los sectores agrícola, industrial y urbano, han degradado de manera extensiva muchos de los ecosistemas de agua dulce de Australia. La declinación reciente y rápida de las condiciones de estos ecosistemas indica que los actuales patrones de consumo de agua son ecológicamente insostenibles, particularmente en los paisajes agrícolas. Los autores emplean tres escenarios del uso y desarrollo de recursos de agua durante los próximos 50 años para examinar las implicaciones de cada uno en términos de su probable impacto sobre los ecosistemas de agua dulce. Estos escenarios engloban el uso agrícola, industrial y urbano de agua, y proponen tendencias en el uso y administración del agua más que un conjunto específico de predicciones. Los autores consideran que dos de estos escenarios, los de negocios como hasta ahora y crecimiento económico, son ecológicamente insostenibles, conduciendo a una declinación significativa de la biodiversidad y el funcionamiento de los ecosistemas de agua dulce. Sólo prevén posibles mejoras de gran escala en las condiciones de los sistemas acuáticos de Australia dentro de su escenario de sustentabilidad ecológica. Este escenario requeriría cambios importantes en los patrones del uso del agua y de una planeación cuidadosa y consideración de un rango de asuntos sociales y económicos. En todos los escenarios los impulsores de gran escala de los ecosistemas, tales como el cambio climático y la salinidad, se volverán grandes impedimentos para lograr mejoras en la condición ecológica de los ecosistemas acuáticos.

(12) «Historias de río: Genealogías de un sistema de vías fluviales amenazadas» (River stories: Genealogies of a threatened inland river system), Findlay, Merrill. (pp. 306-323)

La mayor parte de las personas que hoy viven en la «canasta de pan» de Australia, la muy degradada Cuenca de Muyrray Darling, son descendientes de convictos o colonizadores libres que llegaron al interior en el Siglo 19 o el Siglo 20 temprano. El legado de esas personas incluye la del desposeimiento de pueblos indígenas, la extinción de especies y la degradación en marcha de las comunidades ecológicas que hoy las sostienen. Las historias de ríos de la propia familia del autor, que se «inician» con un par de galeses empobrecidos que migraron con su descendencia desde los altiplanos escoceses, pueden considerarse paradigmáticas. El autor las re-narra en este ensayo, como respuesta al reto del filósofo Alasdair MacIntyre -«Yo sólo puedo responder a la pregunta ¿qué voy a hacer?, si puedo responder a la pregunta previa ¿de qué historia o historias formo parte?». El autor encuentra algunas de esas historias familiares de las que forma parte, especialmente aquellas que han tenido lugar dentro del área de captación del hoy amenazado Río Lachlan son muy incómodas; pero, ¿dónde comienzan realmente? Buscando entender su relación con el río y su área de captación, y con los pueblos indígenas, «su pandilla», desplazados, el autor explora varios posibles «inicios» y se hace una pregunta adicional: de qué historias quiere formar parte como coautor, co-narrador y protagonista. Luego ofrece sus propias historias todavía por ser vividas de «verdad y reconciliación» sobre el futuro de las planicies del interior que él ama.

(13) «Resoñando el paisaje rural» (Redreaming the rural landscape), Alexandra, Jason y Curtis Riddington. (pp. 324-339)

Las culturas y los paisajes humanos co-evolucionan. Los paisajes rurales australianos están cambiando debido a cambios profundos en las relaciones culturales, institucionales y económicas con la naturaleza, y los valores y significados de los paisajes están siendo reinterpretados. Existen signos de que está emergiendo una nueva ética territorial, en la cual dominan el amor por la naturaleza y la acción colectiva. En este ensayo se describe de manera amplia la naturaleza y direcciones de los cambios observados por los autores y se ofrecen tres escenarios para ilustrar posibles direcciones que podrían tomar los cambios en el interior agrícola, las sabanas del norte y las zonas costeras de Australia. Los escenarios ilustran como las personas motivadas e inspiradas podrían vivir en este continente único, anciano y hermoso, y como un ethos de reparación ambiental y habitación sustentable podría transformar los paisajes, estilos de vida y modos de sustento rurales.

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FJBS Admin